Cómo evitar los mareos de tu perro en los viajes por carretera
Viajar en coche es una práctica muy común para todas las personas. Sin embargo, los perros ven esta situación como algo desconocido y, en muchos casos, estresante. Ahora que estamos en los meses de verano donde aumentamos la frecuencia de viajes, especialmente por carretera, desde nuestra clínica veterinaria en Albacete, Clínica Veterinaria Argos, queremos explicaros cómo evitar que nuestras mascotas se mareen cuando viajen por carretera, lo que favorecerá que el trayecto les sea mucho más llevadero.
Cuidado de mascotas: viajar en coche
De acuerdo con los expertos, 1 de cada 5 perros sufre mareos cuando viaja en coche. Además, pueden llegar a aparecer otros problemas, como, por ejemplo, los vómitos o la ansiedad. En los cachorros, esto se debe a que su sentido del equilibrio no se ha desarrollado completamente. En los adultos, es consecuencia del estrés.
Las principales señales de que nuestro perro está mareado e incómodo son, en primer lugar, la inquietud y la ansiedad exageradas. A su vez, muchos manifiestan náuseas y vómitos, así como gemidos o bostezos constantes provocados por la sensación de agobio. Por el contrario, otros permanecen quietos o temblando.
Formas de evitar los mareos
En primer lugar, la presencia de una gran cantidad de alimentos en su estómago hará que sea más frecuente el mareo. Por tal motivo, debemos evitar darle comida sólida entre 4 y 6 horas antes de subir al coche. De igual manera, si el trayecto es muy largo, una buena idea puede ser parar cada dos horas para que dé un pequeño paseo, haga sus necesidades y tome agua.
Asimismo, intentaremos, en la medida de lo posible, que no viaje dentro del transportín. En su lugar, podemos llevarlo en los asientos traseros (recordando siempre que es obligatorio que se mantenga bien sujeto y sin capacidad de acceder a los asientos delanteros). Así, cuanto más cómodo se sienta, menos se mareará.
Otro de los consejos que podemos poner en práctica es colocar una manta, prenda o juguete que tenga su olor. De este modo, se sentirá distraído y relajado, pues se atenuará la sensación de estar en un lugar extraño.
Si se siente asfixiado, se agobiará con mucha más facilidad. Por tanto, bajar las ventanillas para que el aire se renueve es altamente recomendable. De la misma forma, podemos realizar un periodo de adaptación antes del primer trayecto y subir al perro en el coche para que juegue, pero sin que este se ponga en marcha.
Por regla general, los perros relacionan el hecho de ir en coche con la temida visita al veterinario. Por tal motivo, es fundamental que, de vez en cuando, usemos este medio de transporte para llevarlos a lugares que les gusten. Una idea fenomenal puede ser ir a la playa, a un parque para animales o a un lugar de cuidado de mascotas.
No debemos olvidar que nuestra actitud será determinante. Es decir, no es conveniente regañarlos, pero tampoco consentirlos. Por otra parte, la conducción ha de ser lo más tranquila posible, por lo que intentaremos evitar los acelerones, frenazos o giros bruscos. Todo esto, unido al ruido típico de los automóviles, hace que el animal se sienta confundido.
Clínica veterinaria en Albacete: productos antimareo
Si a pesar de poner estos consejos en práctica, el can sigue mostrándose extremadamente agobiado o nervioso, podemos acudir a un veterinario y adquirir algún preparado específico para evitar el vómito y las náuseas.
En definitiva, impedir que nuestro perro se maree en el coche es sencillo si seguimos estos sencillos trucos. No debemos olvidar que se trata de una situación estresante y desconocida para él, sobre todo si no tiene costumbre de viajar. Por ello, la paciencia será determinante, tal y como recomendamos desde Clínica Veterinaria Argos.