VA DE PELOS…

La piel es similar al resto de órganos en nuestro cuerpo, es un organismo vivo y por ello, se ve afectada por una amplia variedad de agentes externos.

El viento, el agua, la tierra, son solamente algunos de los elementos naturales que pueden afectar la piel de tu mascota, lo mismo puede suceder con el tipo de dieta, los champús e incluso las veces que le cepillas… todo esto puede afectar enormemente la piel de las mascotas, lo que puede provocar la acumulación de grasas, un olor desagradable y acentuación de la caída del pelo.

¿Cómo afecta el medio ambiente?

Comenzando con los factores externos, por ejemplo, el contacto con el agua o el barro, si se descuida y no se limpia, entonces la acumulación repercutirá de forma negativa.

Lo recomendable es, sin importar la raza de tu mascota, tratarlo como si se tratase de un niño que ha salido a jugar y que se ha mojado, procura secarlo, limpiarlo tanto el pelo  como las patas.

Por otro lado, la condición corporal de tu mascota también afecta el pelaje. Los animales con pelo largo y rizado, son los que mayor atención requieren, pues de no hacerlo, se compromete el brillo de su pelaje, y de empeorar podrían presentarse enfermedades cutáneas.

Bienvenido a la rutina.

–       Tómalo como un nuevo hábito.

Acostúmbrate a cepillar su pelo por lo menos tres veces a la semana. Esto evitará que se acumulen células muertas sobre el pelaje que crece cada día, además de otros aspectos negativos como la acumulación de grasa, sedimentos, manchas y mal olor.

El acto de cepillar a nuestra mascota es un gesto que ellos toman muestra de cariño y afecto, por lo que los lazos entre el dueño y su mascota se hacen mas fuertes si  desde cachorro se toma la costumbre de cepillarlo.

Además te darás cuenta de que no tendrás tanto  pelo de tu mascota en el suelo de casa, (recuerda que muchos animales suelen “pelechar”, perder o mudar pelo durante la temporada de verano).

–       Báñale cada 15 días.

Esto quiere decir 2 veces al mes, y si el clima así lo permite o si es propicio para ello.

Emplea solamente lo mejor de lo mejor. Seguro no querrías que tu bebe se bañara con los champús más baratos del mercado…

La calidad de los productos que emplees en su pelaje, se reflejará en brillo y olor.

Recent Posts